DESDE EL CIELO NO SOMOS NADA
10 de Julio de 2024
Estando en el cielo, volando sobre la Tierra, viendo como las nubes se forman, observando los campos, sus rayas, sus colores; todo se ve pequeño desde el cielo.
Que insignificante nos vemos de arriba, que chicos, que pequeños.
Qué reflexión, no?
Desde el cielo no somos nada y en la tierra somos mucho.
A veces nos creemos superiores a todo y desde el cielo vemos que no somos nada.
A veces somos arrogantes con muchos y desde el cielo vemos que no somos nada.
A veces somos egoístas con muchos y desde el cielo no somos nada.
¿Por qué te digo esto?
Porque muchas, pero muchas veces en la vida tenemos que entender que estamos de paso y ese paso lo tenemos que hacer bien!
Con valores y convicciones.
Con amor y lealtad.
Con felicidad y armonía.
Porque desde el cielo no somos nada.
Saber compartir y ayudar.
Crear y generar.
Educar y encaminar.
Muchas veces todo se demuestra con acciones, o sea predicar con el ejemplo.
Cuando uno viene de abajo y pega ese salto, tan soñado para los emprendedores, de llegar al éxito, la primera regla de oro es: No olvidar de donde venís y cómo llegaste!
Que la humildad siempre brote por las venas, que tus valores jamás se pierdan y ayudar, porque si tenés la posibilidad de generar fuente de trabajo, hacelo.
Porque seguro vas a ganar menos, pero créeme que cada sonrisa que ingresa a tu negocio o empresa será una familia más feliz.
Hacelo en la tierra porque en el cielo nos sos nada.
Con vida todo, sin vida solo recuerdos.
JBLB